EL EJERCICIO DEBE SER SISTEMÁTICO (CONSEJO A UNA MADRE DISCAPACITADA)
El Señor le ha dado una tarea que hacer que él no hará por usted. Usted debería actuar por principio, en armonía con la ley natural, sin considerar sus sentimientos. Usted debería comenzar a actuar según la luz que Dios le ha dado. Tal vez no sea capaz de hacer todo de una vez, pero puede hacer mucho si avanza gradualmente por fe, creyendo que Dios será su ayudador, y que él la fortalecerá.
Usted podría hacer ejercicio al caminar y realizar las tareas que exijan trabajo liviano en su hogar y no depender tanto de otros. La conciencia de que usted puede hacerlo le dará mayores fuerzas. Si sus manos estuvieran más ocupadas y su cerebro menos activo en hacer planes para otros, su fortaleza física y mental aumentarían. Su cerebro no está ocioso, pero no hay un trabajo correspondiente por parte de los otros órganos del cuerpo.
El ejercicio, para ser realmente una ventaja para usted, debería ser sistematizado y dirigido a los órganos debilitados a fin de que puedan ser fortalecidos por el uso. La cura por movimiento [masaje] es de gran beneficio para una clase de pacientes que están demasiado débiles para hacer ejercicio. Pero que todos los enfermos confíen en ella, dependiendo de ella, mientras descuidan el ejercitar sus músculos por sí mismos, es un gran error.—Testimonies for the Church 3:76 (1872).
LA CORRUPCIÓN DE ESTE TIEMPO ES RESULTADO DEL ABUSO DE CUERPOS Y MENTES
La marea de corrupción que está cubriendo al mundo es el resultado del mal uso y del abuso del cuerpo humano. Hombres, mujeres y niños deberían aprender a trabajar con sus manos. Entonces el cerebro no trabajará en exceso, en desmedro de todo el organismo.— Carta 145, 1897.
EL ESFUERZO DE LA MENTE Y DEL CUERPO TIENDEN A PREVENIR PENSAMIENTOS IMPUROS
Un esfuerzo proporcionado de las facultades de la mente y del cuerpo prevendrán la tendencia a tener pensamientos y actos impuros. Los maestros deberían entender esto. Tienen que enseñar a los alumnos que los pensamientos y actos puros dependen de la manera en que realizan sus estudios. Los actos rectos dependen del pensamiento recto. El ejercicio en tareas agrícolas y en las diferentes áreas del trabajo son una salvaguardia maravillosa contra el uso indebido del cerebro. Nadie podrá mantener su salud si deja de usar las facultades que Dios le dio. No puede guardar a conciencia los mandamientos de Dios. No puede amar a Dios por sobre todas las cosas y a su prójimo como a sí mismo.—Carta 145, 1897.