Se ducha con agua bien caliente, tanto como lo pueda soportar el cuerpo y se caliente la piel, luego cambiar inmediatamente el agua a fría y se ducha 1 minuto con agua bien fría, y luego otra vez agua caliente hasta que se caliente la piel, y terminar con un minuto de agua fría. Secar el cuerpo frotando la piel. Éste tratamiento ayuda a bajar la fiebre pero también a aumentar los glóbulos blancos que nos dan apoyo inmunológico. (Hay que tener cuidado de no calentar el agua por encima de lo que el cuerpo puede soportar, para no desmayar).
Baño de pies (como se practica en Kurhaus Elim y según indicación del Dr. Vega):
1 balde de agua a temperatura del cuerpo
1 toalla
1 olla con agua caliente (para agregar poco a poco el agua al balde)
1 taza de té caliente (aceites esenciales o hiervas frescas si tiene disponible)
El paciente se debe sentar en una silla o en la cama y tapar su cuerpo con una frazada, y durante el tratamiento tomar una taza de té. Los pies se colocan dentro de un balde con agua calentita, agradable a los pies. Se puede agregar aceites esenciales o hierbas frescas como romero, orégano o menta. Se empieza a agregar agua caliente cada vez que se comience a enfriar, y llegar a un punto bien caliente en los pies, es decir, agregar agua caliente cada 3 minutos. Esto se hace durante 20 o 30 minutos hasta que el cuerpo comienza a sudar. En ese momento se termina echando un poco de agua fría encima de los pies, se secan con la toalla y se acuesta en la cama.
Este tratamiento ayuda a sudar, estimula la multiplicación de los glóbulos blancos para resistir el virus y baja la fiebre. Sobre todo, calienta los vasos sanguíneos y ayuda muchísimo a los bronquios y el aparato respiratorio. Lo hemos aplicado frecuente durante el coronavirus.
Mientras otra persona prepara dos ollas de agua hirviendo, con eucalipto u otras hierbas medicinales.
Antes de comenzar el tratamiento se tapa al paciente nuevamente con 2 colchas, todo bien cerrado como una casita que no entre aire, y se cruza la sábana en frente del cuerpo, que no se destape. Al final se envuelve y tapa al paciente con un plástico (puede ser un mantel de mesa), para que no se escape el vapor tan rápido. Es como una sauna.
Ahora en frente de la silla se pone la olla con el agua hirviendo, a la cual se agrega menta, romero y eucalipto. Se deja salir el vapor poco a poco, destapando la olla cada vez más y la persona inhala el vapor por 20 minutos. Cuidado que no esté demasiado cerca para no quemarse ni del vapor ni de la olla. Cuando se está terminando el vapor, se agrega la segunda olla con agua hervida, se destapa la olla a la mitad por 10 minutos y luego se destapa por completo durante 30 minutos.
Cuando se termina el vapor, uno va directamente a la ducha y comienza a ducharse con agua un poco más fresca que tibia, se comienza de los pies, hasta la espalda y los brazos y la cabeza, máximo 2 minutos, solo con agua. Después se va directamente a la cama y tome una taza caliente del siguiente té.
Té:
Cebolla roja (morada o paiteña), 1 litro de agua, 5 dientes de ajo, 5 rábanos, 1 bolsita de hojas de eucalipto, fenogreco, 1 bolsita de pulmonaria, zarzaparrilla (hojas de mora), se puede un poquito de miel si se desea.
Este té se puede tomar durante todo el día, es antiviral, antibacterial, antifúngico, fortalece el sistema inmunológico, y libra los bronquios.
Baños de los brazos:
Algunos pacientes, especialmente los que comienzan con una pulmonía, se agitan cuando sube la fiebre. El baño de los brazos ayuda a equilibrar esta agitación y mejorar el nivel del oxígeno en la sangre.
Se deben colocar los brazos, desde los codos hasta las manos, dentro de un recipiente con agua bien fría. Si el paciente no puede poner sus codos dentro de la fuente, entonces se deben colocar las manos y mojar constantemente los brazos con compresas o toallas. Esto se hace durante 5 a 10 minutos, hasta sentir mejoría. Se puede agregar hielo al agua. Es muy eficaz.