La vida de Cristo se debe revelar en la humanidad. El ser humano constituyó la corona de la obra creadora de Dios, hecho a la misma imagen divina y diseñado para ser un complemento de Dios; pero Satanás se ha esforzado por borrar la imagen de Dios en el hombre y por imprimirle la suya propia. El ser humano es muy querido para Dios, porque fue formado a su propia imagen. Este hecho debería impresionar sobre nosotros la importancia de enseñar por precepto y ejemplo lo que significa el pecado de la degradación del cuerpo que fue formado para representar a Dios ante el mundo…
Para poder comprender el valor que Dios le da al hombre, necesitamos entender el plan de la redención: el costoso sacrificio hecho por nuestro Salvador para rescatar a la raza humana de la ruina eterna. Jesús murió para obtener nuevamente posesión de la perla de gran precio… La vida de los hijos de Dios es una vida de abnegación, de autosacrificio, una vida de humildad. Los que no participan de los sacrificios de Cristo no pueden abrigar la esperanza de compartir su gloria… Hemos de ser juzgados de acuerdo con la manera en que utilizamos el conocimiento de la verdad que nos ha sido presentado (Exaltad a Jesús, p. 42).
En estos tiempos se habla mucho de la naturaleza e importancia de la “educación superior”. Aquel con quien están “la sabiduría y el poder”. Job 12:13 y de cuya boca “viene el conocimiento y la inteligencia” Proverbios 2:6, imparte la verdadera educación superior.
Todo verdadero conocimiento y desarrollo tienen su origen en el conocimiento de Dios. Doquiera nos dirijamos: al dominio físico, mental y espiritual; cualquier cosa que contemplemos, fuera de la marchitez del pecado, en todo vemos revelado este conocimiento. Cualquier ramo de investigación que emprendamos, con el sincero propósito de llegar a la verdad, nos pone en contacto con la Inteligencia poderosa e invisible que obra en todas las cosas y por medio de ellas. La mente del hombre se pone en comunión con la mente de Dios; lo finito, con lo infinito. El efecto que tiene esta comunión sobre el cuerpo, la mente y el alma sobrepuja toda estimación.
En esta comunión se halla la educación más elevada. Es el método propio que Dios tiene para lograr el desarrollo del hombre. “Vuelve ahora en amistad con él”. Job 22:21, es su mensaje para la humanidad.
El método trazado en estas palabras era el que se seguía en la educación del padre de nuestra especie. Así instruyó Dios a Adán cuando, en la gloria de una virilidad exenta de pecado, habitaba este en el sagrado jardín del Edén (La educación, p. 14).
La gracia de Dios debe invadir las cámaras de la mente, la imaginación debe contemplar temas celestiales, y todo factor de la naturaleza debe ser purificado y vitalizado por el Espíritu de Dios.
Los pensamientos deben ser atados, restringidos, debe impedírseles que se desvíen en la contemplación de cosas que solamente debilitan y contaminan el alma. Los pensamientos deben ser puros, las meditaciones del corazón deben ser limpias… Las nobles facultades de la mente nos han sido dadas por el Señor para que las empleemos en contemplar las cosas celestiales. Dios ha hecho provisiones abundantes para que el alma continúe progresando en la vida divina (Hijos e hijas de Dios, p. 109).
Notas de Ellen G. White para la Escuela Sabática 2020. 4to. trimestre 2020 “COMO INTERPRETAR LA BIBLIA” Lección 8: «EDUCACIÓN Y REDENCIÓN» Colaboradores: Rosalyn Angulo & Esther Jiménez A