¿Has escuchado hablar de los misioneros? Son personas que deciden dedicar su vida a hablar de Jesús a quienes no lo conocen.
Marcos era un joven misionero que vivía con nativos americanos. Un día, un guerrero de la tribu quiso pelearse con Marcos, pero como Marcos cree en Jesús, sabe que no debe pelearse con nadie sino vivir en paz con todos. Así que Marcos no peleó a pesar de que lo estaban retando. De esa manera el guerrero entendió que los cristianos dan amor, no pelean.
¿Y yo?
Cuando algún otro niño o niña quiera pelearse contigo, recuerda el ejemplo de Jesús: él nos ama y nos perdona, y quiere que amemos y perdonemos a los demás, no que nos peleemos.
Mi oración para hoy
Querido Jesús, ayúdame a no pelearme nunca con nadie. Y gracias porque tú me amas.
En la Biblia leemos:
«No resistas al que te haga algún mal; al contrario, si alguien te pega en la mejilla derecha, ofrécele también la otra» (Mateo 5: 39).