«Que todo lo que respira alabe al Señor» (Sal. 150: 6). ¿Hemos considerado de cuántas cosas hemos de estar agradecidos? ¿Recordamos que las misericordias del Señor se renuevan cada mañana y que su fidelidad es inagotable? ¿Reconocemos que dependemos de él, y expresamos gratitud por todos sus favores? Por el contrario, con demasiada frecuencia nos olvidamos de que «todo lo bueno y perfecto que se nos da, viene de arriba, de Dios» (Sant. 1: 17).
A menudo los que gozan de salud se olvidan de las admirables bendiciones que les son concedidas continuamente día tras día y año tras año. No rinden tributo de alabanza a Dios por todos sus beneficios. Pero cuando viene la enfermedad, se acuerdan de Dios. El intenso deseo de recuperar la salud los induce a orar fervientemente; y eso está bien. Dios es nuestro refugio en la enfermedad como en la salud. Pero muchos no le confían su caso; estimulan la debilidad y la enfermedad, y se angustian. Si dejaran de quejarse y se elevasen por encima de la depresión y la lobreguez, su restablecimiento sería más seguro. Deben recordar con gratitud cuánto han disfrutado de la bendición de la salud; y si este precioso don les es devuelto, no deben olvidar que tienen una renovada obligación hacia su creador.
La costumbre de meditar en posibles males futuros es imprudente y nada cristiana. Siguiéndola, dejamos de disfrutar las bendiciones y de aprovechar las oportunidades presentes. El Señor requiere de nosotros que cumplamos los deberes de hoy, y soportemos las pruebas. Debemos alabar y honrar a Dios hoy. Por’ el ejercicio de una fe viva hoy, hemos de vencer al enemigo. Debemos velar, obrar y orar como si este fuese el último día que se nos concede. – ELENA G. DE WHITE, Consejos para la iglesia, cap. 51, p. 532.
Después de haber analizado el pasaje de esta semana y de haber repasado el versículo destacado que has aprendido de memoria:
¿Qué aplicaciones personales te sientes motivado a realizar en tu vida?
¿Qué aplicaciones prácticas consideras que deberías implementar en tu escuela, tu lugar de trabajo, tu familia o tu iglesia?
¿Cómo aplicarías a tu vida el versículo que has memorizado?
Lección de Escuela Sabática Para Jóvenes Universitarios 2019. 4to trimestre 2019 “Nehemías” Lección 12: «El poder de la memoria» Colaboradores: Israel Esparza & Misael Morillo