El bolígrafo fue inventado por Ladislao Biro (de ahí el nombre de «birorne») y patentado en Argentina en 1943. También se la llama esferográfica, lapicero, lapicerito, lapicera o pluma atómica.
Sabías que en los tiempos bíblicos los elementos para escribir eran punzones de madera o metal llamados plumas? Con ellos esculpían las letras en la piedra.
También existían las plumas de junco que se empleaban para escribir con tinta sobre papiro. El extremo del junco se golpeaba para que las fibras se separaran y se asemejaran a un pincel. Luego se cortaba en diagonal para que produjera un rasgo fino y parejo. Según los investigadores, en el Antiguo Testamento, tanto Job como Jeremías utiliza cinceles de hierro para escribir. En el Nuevo Testamento, Juan utilizó la pluma de junco.
Lee más en la Biblia, Jeremías 17:1; Job 19:24; 3Juan13.
Seguramente, en algún momento del día vas a utilizar un bolígrafo. úsalo para escribir buenas palabras. La Biblia dice: «Palabras hermosas bullen en mi mente; mi lengua es como la pluma de un buen escritor. ¡Voy a recitar mi poesía ante el rey!» (Salmo 45:1).
Desafío: Busca un bolígrafo y un papel para escribir una frase cariñosa para tu familia. Dibuja un bolígrafo aquí.