LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Romanos 8:20-23; Juan 3:16, 17; Mateo 9:36; Efesios 2:8-10; 1 Juan 3:16, 17; Apocalipsis 14:6, 7.
PARA MEMORIZAR: “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas” (Efe. 2:8-10).
Desde el momento en que hablamos de los mandatos, normas o instrucciones de Dios, corremos el riesgo de pensar que de alguna manera lo que hacemos puede contribuir a nuestra salvación o granjearnos el favor de Dios. Pero la Biblia nos dice repetidamente que somos pecadores salvados por la gracia de Dios a través de Jesús y su muerte sustituta por nosotros en la cruz. ¿Cómo podríamos adicionarle algo a esto de alguna manera? Así mismo, nuestras obras de misericordia y compasión hacia los necesitados no deberían considerarse legalistas. Al contrario, a medida que aumenta nuestra comprensión y precio por la salvación, el vínculo entre el amor de Dios y su preocupación por los pobres y oprimidos se transmitirá a nosotros. Lo que recibimos, lo damos. Cuando vemos cuánto nos amó Dios, también vemos cuánto ama a los demás y también nos llama a amarlos.
Lección de Escuela Sabática Para Adultos 2019. 3er. trimestre 2019 “SERVIR A LOS NECESITADOS” Lección 10: « DE QUÉ MODO VIVIR EL EVANGELIO« Colaboradores: Eunice Castañón & Ricardo Vela