Además de las dos divisiones principales, Apocalipsis también tiene otro
nivel estructural, construido alrededor del Santuario hebreo. Este tema del
Santuario no se limita a ninguna de las dos divisiones principales, sino que
también las atraviesa.
El Santuario terrenal comenzaba en el patio, en el Altar del Holocausto,
donde se sacrificaban los animales. Después de la muerte del animal, símbolo
de la Cruz, el sacerdote entraba en el primer departamento del Santuario,
que era un modelo de lo que Jesús hizo en el Santuario celestial
después de su ascensión. Esto es representado por Jesús caminando entre
los candeleros (Apoc. 1:13). Lee Apocalipsis 4:1 y 2. ¿Qué representa la puerta abierta? ¿Dónde se encuentra esta escena? (Ver, además, Hech. 2:33; 5:31; Efe. 1:20; Heb. 10:12, 13; Sal. 110:1; Apoc. 12:5.) _______________________________________________________
____________________________________________
Poco después de su ascensión, Cristo inauguró el Lugar Santo del Templo
celestial, al ingresar por esta primera puerta abierta. Cuando Cristo aparece
por primera vez en el libro de Apocalipsis, está de pie ante los candeleros del
primer departamento del Santuario celestial (ver Apoc. 1:10-18). Lee Apocalipsis 11:19. ¿Cuál es la importancia del hecho de que, cuando se abrió el Templo celestial, Juan pudo ver el Arca del Pacto, que estaba en el segundo departamento del Santuario terrenal (ver Lev. 16:12-14)?
_______________________________________________________
_______________________________________________________
La imagen del Arca del Pacto en el Santuario celestial es una referencia
indiscutible al Lugar Santísimo, o el segundo departamento. En el libro de
Apocalipsis, podemos ver no solo el ministerio de Jesús en ambos departamentos,
sino el hecho crucial y reconfortante de que los acontecimientos
celestiales y terrenales están relacionados. Incluso en medio de las pruebas
de la historia y de los últimos días, descritas en el libro de Apocalipsis, podemos
tener la seguridad de que “todo el cielo está empeñado en la tarea
de preparar a un pueblo que se mantenga firme en estos días finales. La
conexión entre el cielo y la Tierra parece ser muy estrecha” (MLT 307).