«Cuando las autoridades vieron la valentía con que hablaban Pedro y Juan, y se dieron cuenta de que eran hombres sin estudios ni cultura, se quedaron sorprendidos, y reconocieron que eran discípulos de Jesús» (Hechos 4: 13).
Aquí, en Seattle, se comen muchas papas fritas con ajo cuando uno va al estadio a ver un partido de béisbol. Es cierto que la gente va al estadio para ver el partido, pero tienen también otro motivo: i las papas fritas con ajo! El Safeco Field es famoso por sus enormes, gruesas y grasientas papas fritas, cubiertas con ajo recién rallado. Si miras hacia las gradas de abajo, en cualquier punto entre la multitud puedes ver manos y manos con cajitas llenas de papas fritas con ajo. Habla con cualquier persona a la salida y podrás oler el ajo en su aliento. Pregunta a alguien al día siguiente acerca del partido y sabrás si estaba allí o Io vio por televisión. ¿Cómo? Lo has adivinado: por el ajo. En Seattle decimos que todo aquel con quien te cruces durante la semana siguiente sabrá si fuiste a ver el partido porque apestarás a ajo. El olor es tan fuerte que la gente puede sacar esta conclusión: «Papas fritas con ajo, iSeguro que fuiste a ver el partido!».
Siempre he pensado que el cristianismo debería ser así. ¿No sería genial que la gente Pudiera saber que has estado con Jesús solo por pasar un minuto contigo? ¿No sería increíble que la presencia de Dios fuera tan visible en tu vida que la gente no tuviera que preguntarte sino que simplemente supiera dónde has estado? Quiero tener ese tipo de relación con Dios, ¿y tú? Pedro y Juan la tenían.
El libro de Hechos relata el momento en que dieron su intrépido discurso ante el Sanedrín Y las autoridades se sorprendieron. Sabían que Pedro y Juan eran hombres comunes y corrientes, pescadores sin formación teológica, Sin embargo, sus vidas llevaban el sello de un poder en acción. Por eso las autoridades supieron que habían estado con Jesús.
Cuando pasas tiempo con Jesús, se nota, Los efectos se pueden ver en tu vida y muestran al Señor ante el mundo. La gente puede ver que hay algo diferente en ti. Pide a Jesús
que llene tu vida con su Espíritu para que la gente pueda percibir que has estado con Jesús.