Lee Romanos 1:18 al 20. ¿Qué enseña Pablo aquí?
Son unas pocas oraciones muy intensas. Aquí se revela la realidad y la existencia de Dios “por medio de las cosas hechas”, es decir, por medio del mundo creado, de modo que las personas “no tienen excusa” por su incredulidad. Pablo dice que, por solo la creación, los seres humanos pueden conocer bastante acerca de la existencia y la naturaleza de Dios, y que con justicia pueden ser condenados en el Día del Juicio. El mundo natural nos revela mucho acerca de la existencia de Dios. También la ciencia moderna nos ha revelado detalles acerca de las maravillas de la Creación que nuestros antepasados, hace tan solo trescientos años, y mucho menos hace tres mil años, no podrían ni haber comenzado a imaginar. Aquí hay una ironía interesante: cuanto más compleja la ciencia encuentra la vida, tanto menos probable es que pueda afirmar cuál fue su origen, si un accidente o el azar. Por ejemplo, un smartphone (teléfono inteligente), que parece diseñado, actúa en forma diseñada, revela diseño por dentro y por fuera, y actúa solo por medio de su diseño, funciona así porque así fue diseñado. Sin embargo, nos aseguran que un ser humano, que parece diseñado, revela diseño por dentro y por fuera, y actúa solo según un diseño, es el producto exclusivo del azar. Tristemente, mucha gente cree esto por engaño. Lee Job 12:7 al 10. ¿De qué modo estas palabras reflejan la idea de Romanos 1:18 al 20?
También aquí se nos dice que la realidad de Dios se ve en el mundo creado. Aunque la naturaleza, en su condición caída, no revela plenamente el carácter de Dios, sí revela su poder creador y algunos aspectos de su bondad. ¿Qué cosas en la naturaleza te hablan del poder y la bondad de Dios? ¿Cómo puedes aprender a obtener fuerza y ánimo de los mensajes que te da?
Reavivados por su Palabra: Hoy, 2 Crón. 5 – Durante esta semana, PP caps. 38, 39.