“A procurar vivir en paz con todos, a ocupase de sus propias responsabilidades y a trabajar con sus propias manos (1 Tesalonicenses 4:11, NVI)”
Briana tomo el ultimo bocado de su sándwich y se levanto para irse, señalando al resto del equipo de porristas que estaba en la mesa que hicieran lo mismo.
Su amiga, Tammy, junto las cajas de leche vacías y los bollos de servilletas. Pero los otros dejaron la zona hecha un desastre, incluyendo montones de basura y dos bandejas de cafetería, pegajosas y chorreando líquido.
Vayamos al jardín de enfrente -dijo Briana-. Podemos practicar esa nueva rutina y el número de la pirámide.
Era un día magnifico, y sus ovaciones se mezclaban alegremente con el dulce aroma de la hierba recién cortada. Muy pronto, los pensamientos de las chicas estaban muy lejos del almuerzo, enfocados en cosas más importantes. Entonces, la auxiliar del comedor se acercó.
Chavas, vuelvan y limpien su desastre. Todas ustedes -les indicó.
Yo no deje ningún desastre -argumento Briana, segura de que había tirado su basura.
Te lo agradezco; pero comiste en esa mesa con las otras chicas, y todas dejaron ese desorden. Ahora vayan a limpiarlo ustedes mismas.
Sintiéndose irritada por la interrupción, Briana lidero el camino de regreso a las mesas del almuerzo. Detrás de ella, Tammy se quejaba de que el conserje debía limpiar el desorden, ya que era su trabajo.
La auxiliar escucho los comentarios de Tammy.
Tammy, no esperes que el conserje limpie lo que tu ensucias -dijo-. Ese trabajo debe ser hecho por tus propias manos.
El gruñido se detuvo y, rápidamente, la mesa estuvo limpia. Pronto, las niñas estaban practicando sus rutinas de nuevo.
¿Y AHORA?: ¿Alguna vez dejas tu trabajo para que alguien más lo termine?
Hacer tu propio trabajo es una manera reflexiva de poner a las personas
en primer lugar.
SPLASH: Un sitio web dedicado a la limpieza de la escuela dice que los gérmenes pueden vivir hasta 72 horas en la mayoría de las superficies. Eso incluye los grifos de agua, los escritorios, e incluso las mesas del almuerzo.