«Dios es tan misericordioso y nos amó con un amor tan grande». Efesios 2: 4
¿Cuánto quieres a tus padres? ¿Crees que puedes medirlo? Esto que tengo en la mano es una cinta para medir. Colócate de espaldas a la pared, ahora voy medir tu tamaño.
¡Que alto estás! Voy a hacer una marca para que puedas ver tu altura. Y ahora, ¿cómo medimos el amor de Dios? ¿Cómo podemos saber cuán grande es?
Hay una canción que se llama El amor de Dios. ¿La conoces? Vamos a hacer algo, mientras canto, tu haces los gestos. Cuando diga que es alto, tu subes la mano, cuando diga que es profundo, bajas la mano, y cuando diga que es ancho, abres los brazos.
Voy a comenzar:
El amor de Dios es maravilloso (tres veces), cuán grande es el amor de Dios.
Tan alto que no puedo ir arriba de él, tan profundo que no puedo ir debajo de él, tan ancho que no puedo ir afuera de él, cuán grande es el amor.
Qué bueno es tener un Dios que nos ama tanto.