«Así que toda la gente quería tocar a Jesús, porque los sanaba a todos con el poder que de él salía». Lucas 6: 19
Abre tus manos y cuenta cuántos deditos hay. Si no puedes, mami o papi te ayudarán. Muy bien! Hay diez deditos. ¿Ya conocías el número diez?
En la Biblia encontramos la historia de diez hombres que estaban enfermos. Ellos tenían lepra, Coloca un poco de polvo de talco o trocitos de papel higiénico húmedos en tus brazos. Así se veía la lepra. Y todas las personas se alejaban de los leprosos, porque era una enfermedad contagiosa.
Coloca tu brazo al lado del de papá. ¿Ves como se le pegó un poco de tu polvo? Así era la lepra, se pegaba a otra persona con facilidad. Por eso aquellos diez hombres estaban tristes, porque no podían ver a sus familias, estaban solos y eran rechazados por la gente, que no quería enfermarse.
Un día oyeron decir que Jesús tenía poder para sanar a los enfermos, así que decidieron ir a verlo. Ellos se pararon a lo lejos y le gritaron: «¡Ayúdanos Señorl». Jesús escucho y contesto la petición y los sano a los diez.
¡Cuan grande es el poder de Jesús! Así como sanó a los diez leprosos también puede sanarte a ti, si estás enfermo y se lo pides con fe.
Oración: Amado Jesús, ayúdame a creer en tu poder.