Gracia y paz sean a vosotros, de Dios el Padre y de nuestro Señor Jesucristo (Gálatas 1:3).
-¡De ninguna manera! —dijo Melisa riendo-. ¿Ya viste este?
Señaló el sitio web de la Guía, donde el editor de la revista tocaba
la guitarra. Melisa y su amigo, Tony, miraban con frecuencia el sitio web por sus
gráficas geniales, sus increíbles historias y sus respuestas a las preguntas de la
Biblia. Internet era una de las formas en las que aprendían más acerca de Jesús.
Las formas por las que la gente escucha sobre Dios han crecido con el tiem-
po. Cuando Jesús estuvo en la Tierra, compartió las buenas nuevas acerca de
su Padre, del perdón y de la salvación al hablar con las personas. Caminaba de
pueblo en pueblo, enseñando a sus amigos mientras avanzaban por el camino.
Al regresar a sus casas, las personas que lo habían escuchado compartían todo lo
aprendido con sus familias y amigos.
El apóstol Pablo escribió cartas y viajó de ciudad en ciudad, inaugurando nue-
vas iglesias y alentado a los creyentes en Cristo. Gracias al trabajo de Pablo, la
gente entendió mejor el mensaje de esperanza y amor que Jesús había enseña-
do. Puedes aprender más sobre Pablo leyendo alguna de sus cartas en el Nuevo
Testamento.
Cerca de dos mil años después, utilizando la imprenta recién inventada, Ja-
mes y Elllen de White escribieron relatos y artículos para ayudar a los demás a
comprender lo que la Biblia enseña. Una de las revistas que ayudaron a crear, la
Adventist Review, todavía se imprime en la actualidad.
Ahora tenemos sitios web de cada región eclesiástica disponible en cada país,
y no necesitamos dejar nunca la comodidad de nuestros hogares ni nos preocu-
parnos por los costos de impresión. Internet es un nuevo método para contar al
mundo acerca del mensaje de amor de Jesús.
SPLASH Cuando el apóstol Pablo hacia una carta, no escribía la dirección en un sobre, ponía una estampilla y la de- jaba en el buzón de correo; Pablo entregaba el mensaje terminado a un amigo de confianza para que entrega- ra en mano la carta.