Linterna «El indolente se priva de la inestimable experiencia que se obtiene por el fiel cumplimiento de los deberes comunes de la vida. No pocos, sino miles de seres humanos, existen solamente para consumir los beneficios que Dios en su misericordia les concede […]. Olvidan que negociando sabiamente con los talentos a ellos concedidos, han de ser productores tanto como consumidores. Si comprendieran la obra que el Señor desea que hagan como su mano ayudadora, no rehuirían las responsabilidades» (Los hechos de los apóstoles, p. 262).
Como señala Elena G. de White en la sección Linterna de esta semana, Dios no quiere que seamos meros consumidores. En nuestra sociedad, los últimos aparatos tecnológicos, las modas más actuales, los automóviles más lujosos y las noticias más actualizadas del mundo del espectáculo son vistos como prueba de éxito social. Sin embargo, todo ello es simplemente consumo.
Dios se preocupa por nuestra productividad. Él nos ha creado para que aportemos algo único y distintivo a este mundo. Haz una lista de 25 características individuales que posees y que las demás personas no conocen. ¿Por qué crees que Dios te ha dado esas características?
Plan de lectura para esta semana* Los hechos de los apóstoles, capítulos 33 y 34. 1 Tesalonicenses 2: 6, 9; 2 Tesalonicenses 3: 8-12; 2 Corintios 11: 1 Timoteo 6: 10-19; Colosenses 1: 25-29; Tito 2: 6-8.
Lección de Escuela Sabática Adventista para Jóvenes 2do Trimestre 2014 Lecc. 02 Más que un trabajo