En los pasajes de la Biblia de esta semana podemos ver lo increíblemente importante que es desarrollar una buena ética laboral. Deberíamos mantenernos productivos y ocupados, contribuyendo así a nuestra propia manutención. Si no te es posible trabajar porque asistes a la escuela, existen otras maneras (aparte de la financiera) de contribuir hasta que puedas mantenerte por ti mismo.
Sin embargo, vemos también que «el amor al dinero» puede causar una gran cantidad de problemas. ¿Cómo puedes lograr un equilibrio entre trabajar duro y ganar dinero sin caer en el amor desmedido por este? ¿Cuál crees que sería el equilibrio apropiado? Prepara hoy mismo un presupuesto de tus gastos personales y de tus ingresos. ¿Cómo puedes dejar un lugar para Dios en tu presupuesto mensual?
Plan de lectura para esta semana* Los hechos de los apóstoles, capítulos 33 y 34.
Lección de Escuela Sabática Adventista para Jóvenes 1er Trimestre 2014 Lecc. 02 Más que un trabajo