La relación con Jesús no comienza simplemente con ser bautizados o asistir a la iglesia los días de culto. El cristianismo comienza con la preparación diaria, y la manera de vivir describe la realidad de Jesús en nuestra vida.
Pero, la preparación de la vida cristiana tiene que ver con las prácticas cristianas. Es decir, cada día el cristiano debe comenzar el día con la presencia apacible de Dios. Elena White lo dijo de otra manera: “cada día debemos pedir el bautismo del Espíritu Santo en las primeras horas del día”. Tal vez, estaba refiriéndose a las realizaciones de nuestras actividades diarias.
Por eso, si queremos un cambio en nuestra manera de vivir necesariamente debemos de ir a la Biblia. Y si queremos testificar a las personas perdidas y necesitadas de Jesús debemos pasar tiempo todos los días con él, conversando con él en todo momento y tiempo. Llevando nuestras oraciones silenciosas a él en cualquier actividad o lugar que nos encontremos. Sólo entonces podremos estar preparados para vencer nuestras luchas y debilidades humanas. A medida que predicamos a Cristo con nuestra manera de vivir, la realidad de Jesús en nuestra vida lo cambia todo. Todo a nuestro alrededor cobra valor y sentido; ir a la iglesia, participar de los programas de la iglesia, visitar, ayudar, dar estudios bíblicos, diezmar, ofrendar, orar, ayunar, estudiar la Biblia, testificar… Y naturalmente es cuando Dios puede usar al ser humano frente a los demás.
¿Por qué es importante esto? Porque cuando el ser humano no tiene la esperanza maravillosa de Jesús y su realidad, piensa que su vida no vale nada, que es una cosa y no algo precioso de Dios. Y tú sabes, un cristiano sin el conocimiento de la Biblia no encuentra las fuerzas para vencer sus desesperos, frustraciones, luchas y conflictos. Por lo tanto, el cristiano está llamado a una preparación diaria con Jesús. A una práctica personal del estudio de la Biblia, de la oración constante y la testificación para que otros sepan de la necesidad de Jesús para vivir mejor en este mundo. Porque vuelvo a decir: Jesús no es una opción es una necesidad para el ser humano.
Piensa un poco: Tú tienes dinero pero eso se acaba. Tú tienes salud pero eso se acaba. Tú tienes vida, pero también eso se acaba si no tienes a Jesús de tu lado. Por eso, el tiempo utilizado cuando estás a solas es trascendental. ¿Quién eres cuando nadie te ve o qué haces cuando estas asolas en la intimidad de tu cuarto? Sabes, la adoración personal y sincera con Jesús y la práctica externa es muy importante y trascendental para la experiencia cristiana. En otras palabras, la eficiencia de nuestra manera de vivir y la calidad de nuestra relación con Jesús hacen posible el milagro de sentirnos realizados y ser felices completamente.
Tal vez tú has tratado de ayudar a otros cuando tu propia alma necesita ayuda… Si el cristianismo que predicamos no es un práctica diaria con un corazón sincero, este está vacío; entonces, nosotros también lo estamos. Porque sin la realidad de Cristo tú y yo no somos nada. ¿Entiendes? Tú puedes tener dinero, vestirte bien, tener una familia maravillosa, pero, estás vacío por dentro por el simple hecho que Jesús no es el centro de tu vida. Tal vez un día fuiste bautizado y estuviste en la iglesia pero te fuiste lejos de Dios a vivir una vida de diversiones, fiestas y placeres, y hoy día, estás cansado de tus fracasos y derrotas. Sufres por dentro porque no eres feliz completamente. Hibernas en tu cuarto porque no sabes qué hacer ni a donde ir. Piensas que con quitarte la vida todo se resuelve… Pero, quiero que sepas, que en el nombre de Jesús hay poder para ser libertado de los vicios y las angustias del corazón. Vuelve a Jesús. Confía en él y todo se resolverá.
La vida cristiana requiere tiempo para orar y para el estudio de la Biblia como para otras cosas todos los días. Pero, el mensaje de salvación está en la manera de vivir en este mundo con Jesús. Pero, el cristiano necesita invertir tiempo de modo que siempre se encuentre preparado para cuando Jesús vuelva. Sin embargo, nuestro cristianismo si no se practica no sirve de nada.
El desafío de hoy:
1. Cada mañana levántate temprano antes de ir a tus actividades diarias y pide a Dios por el bautismo del Espíritu Santo en ese día.
2. Practica lo que aprendiste de tu estudio personal de la Biblia.
3. Practica la oración silenciosa. ¿Tal vez te preguntes cómo se hace? En cualquier lugar que te encuentres realizando tus actividades, ora en tu corazón por tus inquietudes.
“Recuérdate, esto es necesario practicarlo todos los días hasta que Jesús vuelva”